Un estilo de construcción que permite a los negocios contribuir con el medio ambiente, al mismo tiempo que invierten en su personal, un manejo más eficiente de los recursos y un gran ahorro monetario.

Día a día son más las empresas que toman conciencia del medio ambiente y buscan soluciones inmediatas y a largo plazo que puedan contribuir considerablemente con el planeta. Una de las más conocidas es la certificación LEED. Su siglas significa Leadership in Energy and Enviromental Design, data del año 1993 y, a manera simple, es un sistema que certifica la sostenibilidad de un edificio a escala universal, con el propósito de que el impacto medioambiental sea cada vez menor. 

Un estudio realizado por la Universidad de Notre Dame sostuvo que los edificios con una certificación de sostenibles aumentan el éxito empresarial. En él, llamado “The relationship between corporate sustainability and firm financial performance”, se establece que las empresas que son denominadas como “verdes” producen beneficios competitivos intangibles como un aumento en la productividad del empleado y una mejor imagen ante la sociedad. 

Certificación LEED

Ventajas para la empresa

Diversos expertos han expresado los beneficios que esta certificación puede traer para un negocio. Desde la planeación hasta la ejecución de la edificación, se toman en cuenta factores que asegurarán una serie de ventajas claves como la optimización de la energía, el agua, los materiales de construcción y los espacios; siempre buscando que el impacto hacia el medio ambiente sea lo menor posible.

Estas son tres razones por la que la empresa se verá beneficiada de contar con una certificación LEED:

Ahorro económico

El blog de sustentabilidad  y responsabilidad empresarial ExpoK asegura que “cumplir con los estándares de la certificación LEED genera ahorros de entre un 30 y 70% en consumo de energía, de 30 a 50% en uso de agua y reducción de residuos de hasta un 90%”. Esto se puede traducir a dinero que se verá reflejado en los estados de cuenta finales. 

Construir los sistemas para que los recursos se usen de manera eficientes puede ser más costoso, pero los expertos consideran que los beneficios en el ahorro de su utilización y monetario se verán tanto a corto, como mediano y largo plazo. 

Además, según Espacio Santa Fe, los edificios con esta clasificación tienen menos probabilidades de volverse obsoletos, tampoco necesitarán mayores remodelaciones en el futuro y sin duda incrementan el valor de los activos. Inclusive, pueden ser exonerados de pagar ciertos impuestos. 

Contribuye a un mejor clima laboral

La revista ACR Latinoamérica menciona que según una encuesta publicada por el Consejo de Construcción Verde de Estados Unidos (USGBC), los trabajadores que laboran en edificios ecológicos con certificación LEED son más felices, más sanos y más productivos que los empleados en edificios convencionales y no LEED.

La encuesta también muestra que muchos empleados muestran deseos de trabajar en empresas que están preocupadas por el medio ambiente y juegan un rol importante en combatir el cambio climático.

Por otro lado, el arquitecto panameño Rómulo Rodríguez asegura que las personas llegan a sentirse mejor porque “la arquitectura sostenible procura un diseño donde la luz solar entre constantemente y la ventilación se renueve de forma automática, controlando los niveles de dióxido de carbono. Todo esto se traduce en un colaborador no solo más activo y saludable, sino en un colaborador entusiasmado por realizar su trabajo”.

Impacta positivamente en la imagen de la empresa

Las tendencias ambientalistas han hecho que los clientes también busquen empresas que compartan los ideales de salvaguardar el mundo y que contribuyan con la crisis ambiental que se está viviendo. Por lo que, volverse una organización verde o en pro de la ecología se ha vuelto también una estrategia que marca como factor distintivo y competitivo entre el resto. 

Los clientes se fijarán primero en el valor agregado que la empresa tiene (en este caso ser ecológica), por lo que pagar un poco más por cierto producto no será un problema del todo, ya que se sabe que de manera indirecta también se está contribuyendo a salvar al planeta. 

Poseer una certificación LEED dará prestigio a la empresa, ya que este es un reconocimiento internacional que cumple los más altos estándares de calidad. El proyecto como tal gozará de una credibilidad mayor, ya que los procesos que implica construir un edificio como este son minuciosos y pensados en pro de la población, pero sobretodo el ambiente. Fuera de ser visto como una opción para contribuir con salvar al planeta, una edificación de este tipo asegura ahorros inigualables y un mayor manejo de los recursos.